Mil veces con el Maestro,En santa comunión,Escucho los acentosDe hermosa agrupación. CORO:“¡Aleluya, amén! ¡Aleluya, amén!¡Aleluya, amén! Amén, amén!” De aquellos que sufrieronSed, hambre y dolor;Mas hoy glorificadosEstán con el Señor. Escucho los acentosDel canto sin igual:Y mi alma al punto se uneAl coro celestial. Unido estoy con ellosAhora por la fe,Mas pronto frente al tronoCon ellos cantaré.

Bienaventurados los de limpio corazón,Que no aman el tesoro de aquí:De tranquilidad y paz gozan cada día más,Y del cielo el gozo tienen ya en sí. CORO:¡Oh, cantemos aleluya!Sí, de todo corazón;Por amor al Salvador, a su nombre dad loor,Y por siempre cantaremos de su amor. Grande dicha y favor me concede mi Señor,Por su sangre derramada en la cruz;Soy guardado siempre fiel por la fe que tengo en él,Y me regocijo andando en la luz. Al Señor obedecer y su Espíritu tener,Es un verdadero cielo en mi ser;Y por su inmenso amor hacia el pobre pecador,Cantaré sus alabanzas más allá. ¡Cuán perfecta es mi paz!, no anhelo nada másEn el mundo que su luz y su verdad;Con mi amado Salvador, poseído de su amor,Estaré contento por la eternidad.

¿Qué me puede dar perdón?¡Sólo de Jesús la sangre!¿Y un nuevo corazón?¡Sólo de Jesús la sangre! CORO:Precioso es le raudalQue limpia todo mal;No hay otro manantial,¡Sólo de Jesús la sangre! Fue el rescate eficaz,¡Sólo de Jesús la sangre!Trajo santidad y paz,¡Sólo de Jesús la sangre! Veo para mi salud,¡Sólo de Jesús la sangre!Tiene de sanar virtud¡Sólo de Jesús la sangre! Cantaré junto a sus pies,¡Sólo de Jesús la sangre!El Cordero digno es,¡Sólo de Jesús la sangre!

¿Será Posible, mi Señor, que me avergüence yo de ti?De ti, Señor, mi Salvador, que ángeles adoran hoy?¡Avergonzarme de Jesús, mi único amigo fiel!¡No, mi Señor! Te adoro, hoy, eterno Rey, mi Salvador. CORO:¡No, mi Señor! Te adoro, hoy, eterno Rey, mi Salvador.Te seguiré, te alabaré, te ensalzaré, mi Salvador. ¡Avergonzarme de Jesús!,Cuando sin culpas por lavar,No tenga bien que pedir, ni alma tenga que salvar;Orgullo tengo en confesar que mi confianza pongo en ti;Será mi gloria que Jesús no se avergüence, no, de mí. ¡Avergonzarme de Jesús!, de tierra y mar el Creador,Del Unigénito de Dios, del Rey de gloria, mi Señor;De mi Señor, que volverá con diez mil ángeles de luz:No, mi Señor, doy todo a ti, me llenas con grata luz.