Hubo quien por mis culpas muriera en la cruz
Aun indigno y vil como soy;
Soy feliz, pues su sangre vertió mi Jesús,
Y con ella mis culpas borró.

CORO:
Mis pecados llevó, en la cruz do murió
El sublime, el tierno Jesús,
Los desprecios sufrió, y mi alma salvó,
El cambió mis tinieblas en luz.

El es tierno y amante, cual nadie lo fue,
Pues convierte al infiel corazón;
Y por esa paciencia y ternura yo sé
Que soy libre de condenación.

Es mi anhelo constante a Cristo seguir:
Mi camino su ejemplo marcó;
Y por darme la vida él quiso morir:
En la cruz mi pecado clavó.

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