Un palacio en el gran país
a los suyos Dios ha preparado;
y. a veces al hogar feliz,
viene a llevar algún amado.

– – – – – – Coro: – – – – – – –
No hay dolor, no hay dolor,
en mi hogar,
ni tristeza, allá no entra,
en el cielo lágrimas no habrá,
solo gozo en mi país se encuentra.

Pero allá ninguno puede entrar
que no es limpiado del pecado;
di si irás al cielo a morar
en la posesión que Él ha dado.

Fluye un río santo de la cruz
do tu alma puede ser limpiada;
lávate en la sangre de Jesús
y será tu alma al cielo alzada.

Me espera allá un dulce hogar,
donde puedo entrar
aunque indigno.
Oh, yo anhelo a mi Jesús mirar!
Ven, oh ven, mi Salvador benigno!