Canta de Jesucristo
el inefable don,
que Dios al mundo diera,
para su salvación.
Su sangre tan preciosa,
que en la cruz vertió,
lava al pecador de toda maldad.
– – – – – – Coro: – – – – – – –
Cristo murió por todos,
para su salvación,
con Dios así los hombres
reconciliados son.
El velo en el templo, roto ha sido ya,
el trono de la gracia abierto está.
Canta al afligido,
que sufre en el dolor,
a todos los perdidos
cántales del amor.
Canta a los cautivos
y donde no hay luz,
Cristo murió por todos
en cruenta cruz.
Canta en la noche oscura,
Cristo contigo va;
canta temprano y tarde
que Cristo fuerza da.
Canta sus alabanzas
por tan inmenso amor;
canta, sí, canta siempre al Salvador.