Pecador, Jesús te llama
con acento de candor.
¿Por qué eres tan rebelde?
¡Es sublime su amor!
– – – – – – Coro: – – – – – – –
Deja entrar al Rey de gloria,
abre bien tu corazón;
deja entrar al Rey de gloria,
date prisa, hay perdón.
Por el mundo y sus placeres
tienes siempre mucho amor.
¿Nada por el Rey de gloria?
¿Nada por el Salvador?
Cristo llama, siempre llama,
ábrele tu corazón,
no aguardes a mañana,
hoy te espera salvación.
Haz lugar, Jesús golpea,
no te quiere condenar;
pronto cesará su gracia.
¿No la quieres aceptar?