guiaré al peregrino extraviado,
Bondadoso hasta el pie de la cruz;
Yo diré al corazón angustiado:
Hallarás tu consuelo en Jesús.
CORO:
Yo guiaré, yo guiaré,
Al sediento de vida y de luz;
Yo guiaré, yo guiaré,
Al perdido a los pies de Jesús.
Yo diré al que buscare la calma,
Que se llegue al amante Jesús;
Yo diré con placer a aquella alma:
¡Que te inunde sus ondas de luz!
Al que vague buscando una fuente
Do apagar de su sed el ardor:
Lo guiaré con amor diligente
A Jesús, la gran fuente de amor.
Al cansado que busque reposo,
Sin hallarlo en su duro penar,
Le diré que reciba al bondadoso:
“Ven a mí, yo te haré descansar.”