Jesús borró ya mi maldad
su sangre al derramar,
Él quiso en mí su gran bondad,
venir a revelar.
– – – – – – Coro: – – – – – – –
¡Aleluya! Él me salva,
pues en mí su amor probó,
¡Aleluya! Él me salva,
para siempre me libró.
Él es mi paz, mi protección,
mi buen Consolador;
asilo fiel en la aflicción,
amigo en el dolor.
Ningún peligro temeré,
si Él conmigo está;
ni dudas ni dolor tendré,
pues Él me guardará.
Jesús, tu nombre alabaré
con todo el corazón
y alegre al mundo anunciaré
tu grande salvación.