Hay una paz que el mundo no comprende,
Y una vida oculta en Jesús.
Y un poder para el más debilitado
Que siempre anda en divina luz.
Y un poder para el más debilitado
Que siempre anda en divina luz.

Cuando la carga me es muy pesada,
Jesús me da coraje y poder,
El no me deja en la hora negra,
Sino hasta el fin me ha de sostener
El no me deja en la hora negra,
Sino hasta el fin me ha de sostener

¡Oh! Mi Jesús, enséñame paciencia,
Para llevar mi cruz en pos de Ti.
y a usar, mi tiempo y mi vida,
En el servicio, que yo recibí.
y a usar, mi tiempo y mi vida,
En el servicio, que yo recibí.

Entonces, con el pueblo redimido,
Entonaré en el coro angelical
Eternamente salvo del pecado,
Yo viviré en gloria celestial.
Eternamente salvo del pecado,
Yo viviré en gloria celestial

Comparte este himno:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *